Jim, originario de Inglaterra y residente en Lanzarote desde 1998, se reentrenó en 2014 como terapeuta de masaje deportivo en la Universidad de Bedfordshire. En 2019 se certificó en acupuntura médica y punción seca, y sigue perfeccionando sus habilidades con el osteopata deportivo John Gibbons en Oxford. Actualmente, está completando su formación en el método Bodymaster.
La terapia de masajes deportivos alivia la tensión muscular, mejora la flexibilidad y previene lesiones en atletas y personas activas. Con la punción seca, que utiliza agujas para liberar puntos gatillo, se acelera la recuperación y se alivia el dolor crónico.